Mar del Plata Antigua

Las veredas de nuestra ciudad son una trampa mortal para ancianos, personas con incapacidad visual y física, como también niños y transeúntes en general. No es excusa que este sitio en particular esté abandonado, existen otras numerosas veredas por las cuales no se puede transitar. Todos tenemos la obligación de cumplir con el mantenimiento de nuestro entorno, será beneficioso para todos. La fotografía muestra una de las paredes del abandonado Château Frontenac de Mar del Plata.

Hubo un tiempo en que nuestra ciudad era un ejemplo de pulcritud, la experiencia de los Europeos que fundaron Mar del Plata era amplia en ese sentido, aún recordaban las enfermedades producidas por la falta de higiene. Podemos aseverar sin equivocarnos que hasta los años '50 esa importante costumbre se mantuvo. En las décadas posteriores esto cambió, la ciudad fué creciendo desordenadamente, y como consecuencia, el aspecto urbano con sus buenas costumbres se perdió. Aún estamos a tiempo de revertir esta desgraciada situación, el único y eficaz método es educar a los más jóvenes.